ISSN electrónico: 1885-5210
DOI: https://doi.org/10.14201/rmc.33087
Medical Embryology in the Cinema. The Case of the Hilton Conjoined Twins
Stella Maris ROMA-MASTROIANI1; Fernando Adrián PÉREZ-GURDULICH2; Alberto Enrique D’OTTAVIO CATTANI1
1 Facultad de Ciencias Médicas y Consejo de Investigaciones de la Universidad Nacional de Rosario, Rosario (Santa Fe) (Argentina).
2 Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Rosario, Rosario (Santa Fe) (Argentina).
Autor para correspondencia: Alberto Enrique D’Ottavio Cattani
Correo electrónico: aedottavio@hotmail.com
Recibido: 27 de junio de 2024
Aceptado: 7 de octubre de 2024
Resumen
Este trabajo analiza el filme dramático de cine negro y crimen Chained for life, basado muy libremente en aspectos de la vida de las hermanas Daisy y Violet Hilton, gemelas unidas pigópagas. Interpretado por ellas, narra la historia de una hermana siamesa que mata a su marido y el juicio al que es sometida. El jurado debe dictaminar, de ser declarada culpable de homicidio en primer grado si a su hermana le cabe la misma pena. En tal contexto, puede resultar útil al alumnado en ciencias de la salud para debatir sus facetas religiosas, legales y ético-morales.
Palabras clave: embriología; medicina; cine; gemelos unidos.
Abstract
This paper analyzes the crime noir drama film Chained for Life, loosely based on aspects of the lives of Daisy and Violet Hilton, pygopagus conjoined twin sisters. Played by them, it tells the story of a conjoined twin sister who kills her husband and the trial to which she is subjected. The jury must decide, if she is found guilty of first-degree murder, whether her sister receives the same sentence. In this context, it may become useful for health sciences students for debating its religious, legal, and ethical-moral aspects.
Keywords: embryology; medicine; cinema; conjoined twins.
Los gemelos unidos, antes «siameses», son consecuencia de alteraciones en embarazos gemelares monoamnióticos donde dos fetos completamente formados se fusionan en determinados sitios anatómicos1.
Según el área anatómica afectada será la denominación asignada, concluida siempre con el sufijo griego pagos que significa unión1.
Hallándose este trabajo centrado en el caso de gemelas pigópagas corresponde aclarar que, en ellas, la fusión abarca sacro, cóccix y perineo. La vaina dural y la porción terminal medular suelen estar involucradas por lo que esto, sumado a la morfología perineal, genitourinaria y sacrococcígea, es un hecho relevante a considerar ante una eventual separación. El debate sobre su causa y mecanismo permanece y se focaliza en tres teorías: (1) fisión: gemelación monocigótica y fisión incompleta de un solo embrión; (2) fusión: fusión secundaria de dos discos embrionarios inicialmente separados y (3) apiñamiento: inducción de dos primordios axiales1.
Daisy y Violet Hilton (Foto 1) nacieron en Brighton (Inglaterra) durante 1908. Externamente adheridas por sus caderas y nalgas, compartían internamente la circulación sanguínea, poseían sus pelvis unidas y mantenían separados sus órganos vitales, por lo que su separación fue descartada dados los altos riesgos que entrañaba.
Foto 1. Las gemelas unidas Hilton
La madre Kate Skinner, soltera, fue auxiliada por Mary Hilton, quien, previendo futuras ventajas comerciales, las «adquirió» para, luego, junto con su esposo e hija someterlas a estricto control, no exento de abusos, y entrenarlas en música, canto y baile. Así, Vivian llegó a ser saxofonista y Daisy, violinista.
Su actividad artística comenzó en 1911 en Gran Bretaña, prosiguió en Alemania, Australia y Estados Unidos hacia 1916, llegando a cumplir una rutina con Bob Hope una década más tarde.
Al fallecer Mary Hilton, pasaron a depender de su hija y su esposo: Edith y Meyer Meyers, quienes continuaron con los maltratos hacia ambas.
En 1925, filmaron The Unholy Three (El Trío Fantástico en España), película muda estadounidense estelarizada por Lon Chaney y dirigida por Tod Browning.
En 1931, se independizaron legalmente de sus tutores aconsejadas por Harry Houdini y fueron indemnizadas por daños y perjuicios con una cifra equivalente en la actualidad a aproximadamente 1.600.000 dólares.
Tras intervenir en el filme Freaks (La Parada de los Monstruos en España), protagonizada por Wallace Ford y dirigida igualmente por Tod Browning (1932), se embarcaron hacia el Reino Unido donde permanecieron hasta fines de 1933 cuando retornaron a los EEUU. Daisy se tiñó el cabello de rubio y comenzó a vestir atuendos distintos para diferenciarse de Violet, quien inició una relación sentimental con el músico Maurice Lambert con el que solicitaron una siempre rechazada licencia matrimonial en veintiún estados.
A modo de ardid publicitario, Violet contrajo enlace con el actor James Moore, notoriamente embarazada. Su hijo fue entregado en adopción y el matrimonio, anulado diez años después.
A su vez, Daisy se casó con Harold Estep (artísticamente Buddy Sawyer) en 1941; unión que duró apenas diez días.
En 1952, las gemelas unidas protagonizaron Chained for Life (Encadenadas de por vida en España) basada libremente en sus vidas.
Su última aparición pública fue en 1961 en un autocine en Carolina del Norte, donde fueron abandonadas por su mánager sin transporte ni ingresos.
Trabajaron en una tienda de comestibles y alquilaron una casa de dos dormitorios, cortesía de la iglesia del dueño de la tienda.
Los primeros días de 1969 fueron halladas muertas en su casa por la policía, víctimas de la gripe de Hong Kong, a causa de una denuncia radicada debido a que no se habían presentado a su labor ni respondían a llamados telefónicos.
De acuerdo on la autopsia, Daisy fue la primera en fallecer. Violet, que no pidió ayuda, murió entre dos y cuatro días después. Por su estado económico deficitario, fueron inhumadas en el cementerio Forest Lawn West (Charlotte) en tumba compartida con Troy Thompson, veterano de Vietnam, a cuyo padre conocían.
Fueron recordadas en dos musicales: Twenty Fingers Twenty Toes (1989) y Side Show (1997) (rescrita en 2014) y en un documental Bound by flesh (premiado en los Festivales de Cine de Hollywood en 2012 y en el Internacional de Luisiana en 2013). Asimismo, son evocadas en un autobús que circula en Brighton, una placa azul en su casa natal y una colección de cuentos2.
Título: Chained for life.
País: Estados Unidos.
Año: 1952.
Dirección: Harry L Fraser.
Guion: Ross Frisco (idea original), Nat Tanchuck (guion), Albert de Pina (diálogos adicionales).
Música: Henry Vars. Durante el filme, son interpretadas en acordeón: la Obertura de Guillermo Tell de Gioachino Rossini y la Danza Húngara No. 5 de Johannes Brahms y tres duetos a cargo de las gemelas unidas: Every Hour of Every Day (dos veces) y Love Thief (una vez).
Fotografía: Jockey Fendel.
Montaje: Joe Gluck.
Intérpretes: Daisy y Violet Hilton, Mario Laval, Norval Mitchell, Allen Jenkins, Patricia Wright.
Color: blanco y negro.
Duración: 81 minutos.
Género: drama.
Idioma: inglés.
Sinopsis
Filme dramático de cine negro y crimen narra la historia de una hermana siamesa que mata a su marido y el juicio al que es sometida. En éste, el jurado debe dictaminar, de ser declarada culpable de homicidio en primer grado si a su hermana le cabe la misma pena.
Compañía productora: Spera Productions.
Enlace: https://www.youtube.com/watch?v=NoFQNnB7cOg
Cartel original
En la primera secuencia, un juez (Norval Mitchell) solicita auxilio a los espectadores para la solución de un dilema.
La acción se retrotrae a un juicio en el que la morena Vivian Hamilton (Violet Hilton) es juzgada por haber matado al esposo de su rubia hermana Dorothy (Daisy Hilton).
Partiendo de lo acontecido en el tribunal y a medida que deponen los testigos convocados, lo ocurrido es narrado fragmentaria pero diacrónicamente.
Así, en el marco de actos vodevilescos (un malabarista que, además, realiza acrobacias ciclísticas, y un virtuoso acordeonista que interpreta composiciones a velocidad de vértigo), las gemelas aparecen como exitosas cantantes.
Su agente publicitario (Allen Jenkins) valora que un ardid publicitario catapultará su carrera y acuerda con quien realiza un espectáculo con diversas armas (Mario Laval) para que simule un romance con una de ellas. Con el disgusto de Vivian, Dorothy participa en principio de tal simulación, pero termina enamorándose de él, quien tiene una relación amorosa con su partenaire (Patricia Wright).
El tirador le propone matrimonio a Dorothy pero acusaciones de bigamia lo impiden. Ésta insta a su hermana a exponerse ambas a una separación quirúrgica que tampoco es posible por los severos riesgos que acarrea.
No obstante, merced a los oficios de un ministro religioso ciego, consiguen concretar su enlace en el escenario del teatro y ante el multitudinario público asistente.
Excediendo tal situación, el recién casado abandona a su esposa al día siguiente argumentado una inviable convivencia forzosa con Vivian. Ésta, que descubre la vinculación amorosa de aquél con su partenaire es invadida por una indignación incontrolable por la humillación a que ha sido sometida su hermana.
Aprovechando el espectáculo de tiro y desde uno de los bastidores, se adueña de un revólver entre los que el tirador emplea durante su acto y le da muerte en escena ante un público horrorizado.
La acción retorna al tribunal. El juez tarda en expedirse por el dilema que supone condenar a Vivian a muerte o a cadena perpetua estando ligada orgánicamente a la inocente Dorothy.
En el momento en que da la impresión de que el juez emitirá su dictamen, regresa la secuencia inicial en la que, ahora, el magistrado mirando a la cámara, y en final abierto, traslada al espectador la responsabilidad preguntando cómo resolvería tal dilema.
El filme, que incorpora libremente aspectos de la vida real de las gemelas como dable es inferir de su antedicha biografía, fue un fracaso total, siendo proyectado en el Festival de Cine Lo Peor de lo Peor junto a otras películas de igual tenor.
Sin embargo, y al margen de su debilidad de factura, es susceptible de ser utilizado para el debate con alumnado de ciencias de la salud por las facetas religiosas, ético-morales y legales que ofrece.
1. Boer LL, Schepens-Franke AN, Oostra RJ. Two is a crowd: On the enigmatic etiopathogenesis of conjoined twinning. Clin Anat. 2019;32(5):722–741.
2. Jensen D. The lives and loves of Daisy and Violet Hilton: A true story of conjoined twins. Berkeley (CA): Ten Speed Press; 2006.